Cualquiera puede viajar a Marruecos y vivir una experiencia irrepetible. Pero la diferencia la marcan las personas: Viento Norte-Sur hace de este viaje, un descubrimiento interno y realmente sentir que estás vivo. Te hace repetirte a ti mismo constantemente: «Recuerda quién fuiste mientras viajabas».
Una organización completa y bien adaptada a los cambios de última hora. Espectacular personal. Estupendos guías. Nuevos amigos y compañeros.
Lo que más me ha gustado es la conexión con el grupo y el trekking por el Atlas.