Todo empieza una tarde tranquila cuando abres el correo de la universidad y en la bandeja de entrada y encuentras un mensaje en el que se promociona el viaje. Desde ese instante se puede decir que » la curiosidad mató al gato».
Lo que más me llamó el atención del programa que había preparado para el viaje era el ir a prestar cosas que para nosotros son básicas y nos sobran como es ropa y medicamentos entre otros a personas que lo necesitan.
Tanto los que sois de mente y culo inquieto como los que no, os recomiendo este viaje, es un viaje en el que desde mi punto de vista y experiencia vivida te sientes realizado, ves como las cosas que llevas llegan a su destino final.
Lo que más me impactó en este aspecto fue cuando llegamos a una de las asociaciones a repartir el material y vino una madre con su niña a pedir unas zapatillas.. ya ves tu unas simples zapatillas que en nuestro día a día no valoramos ni le damos la importancia que tienen. En ese mismo instante se puede decir que tuve una de las mejores sensaciones que he tenido.
Aparte del tema solidario también hicimos turismo, no hay palabras para describir el lugar y lo magníficamente que nos trataron los lugareños.
En mi caso se puede decir que empecé el viaje solo con mi espíritu aventurero, y volví con un autobús lleno de amig@s y gente realmente maravillosa.
Sin duda el mejor viaje de mi vida¡¡
Gracias a las personas que hacéis posible esto¡¡