Pablo Zárate
Mi padre, entre risas, siempre me recuerda que guarda una lista de los diferentes trabajos que he tenido. No ejerzo labor relacionada con mi formación académica (publicidad y periodismo). Tuve la suerte de poder hacer comunicación para sensibilizar sobre la discapacidad y hacer visibles a personas con capacidades diferentes. Ése fue mi primer contacto con el asociacionismo.
Actualmente soy feliz como director de una academia en la que trato de desarrollar el potencial de mis alumnxs.
El último contacto aquí, en Viento Norte Sur. Llegué sin saber dónde me metía, pero ahora sé que de aquí no quiero salir. Creo que la participación en algún viaje, convivencia o voluntariado, vincula especialmente. Tanto a los compañeros de aventuras, como a otros que viven paralelamente (o han vivido) otras similares. O no tan similares, pero bajo la misma bandera. Cooperar, compartir, celebrar, disfrutar…son algunos de los verbos que asocio a ese vínculo y a esta asociación. Por eso me gusta la magia de la convivencia y la posibilidad que ofrece para descubrir gente que suma. Por eso me gusta el poder conocer diferentes lugares y culturas de la mano de esa gente (en principio) desconocida.